El Adviento es un tiempo de preparación y espera en la tradición cristiana que marca el inicio del año litúrgico. Este período de cuatro semanas se celebra antes de la Navidad y tiene como objetivo recordar a los fieles la llegada de Jesucristo al mundo.

El Adviento comienza el domingo más cercano al 30 de noviembre y finaliza el 24 de diciembre, víspera de Navidad. Durante este tiempo, los creyentes se preparan espiritualmente para la venida de Jesús a través de la oración, la reflexión y la caridad. También se encienden velas en una corona de Adviento, una tradición que simboliza la luz que viene al mundo con la llegada de Cristo.

El Adviento se centra en cuatro temáticas principales: la esperanza, la paz, la alegría y el amor. Cada semana, se enciende una vela de la corona de Adviento que representa uno de estos valores. Los fieles son invitados a reflexionar sobre cómo pueden vivir estos principios en sus vidas diarias y compartirlos con los demás.

Durante el Adviento, la Iglesia invita a los creyentes a renovar su fe, esperanza y amor en Cristo, recordando que su venida al mundo es motivo de alegría y salvación para todos. Es un tiempo de espera activa y expectante, en el que se invita a los fieles a preparar sus corazones y hogares para recibir a Jesús en Navidad.

En resumen, el Adviento es un tiempo de espera y preparación en la tradición cristiana que nos invita a reflexionar sobre el significado de la venida de Jesucristo al mundo. Es una oportunidad para renovar nuestra fe y esperanza en Él, y para vivir los valores del Evangelio en nuestra vida cotidiana.